Page 23 - Ni-un-fraude-mas-eBook
P. 23
ellos, compraron votos, pero no conciencias y, por lo
mismo, no obtuvieron en las urnas ni los votos así
comprados.
e. Que la ADO CIVILISTA tiene en su poder documentos y
actas genuinos que acreditan, de manera fehaciente, el
triunfo indiscutible de sus candidatos a los diversos cargos
de elección popular.
f. Que, en consecuencia, la ADO CIVILISTA reclama el
reconocimiento del legitimo triunfo de sus candidatos,
triunfo que, gracias al apoyo masivo y patriótico del pueblo
panameño, no pudo ser desvirtuado por las coacciones y los
fraude de diversa índole llevados a cabo antes, durante y
después de las votaciones por la dictadura militar con la
participación activa del Tribunal Electoral.
g. Que la única razón por la que el Tribunal Electoral pretende
anular las elecciones es la imposibilidad de ocultar la
victoria de la ADO CIVILISTA ante la abrumadora e
indiscutible evidencia de su triunfo electoral”.
Hoy reiteramos nuestra posición y rechazamos, inequívocamente, la
calumnia de que nuestra campaña política fue apoyada por potencias
extranjeras interesadas en instalar en la República de Panamá un gobierno
entreguista, que permita a Estados Unidos permanecer en Panamá más allá
del año dos mil, fecha en que el Canal debe revertir a Panamá a tenor de
los Tratados Torrijos – Carter. Ni ello es cierto, ni la dictadura tiene
autoridad moral para cuestionar nuestro patriotismo ni mucho menos para
empañar la victoria electoral del pueblo panameño, acusándolo,
cínicamente, de haberse vendido por un puñado de dólares.
A propósito del triunfo electoral de la oposición conviene citar las
palabras textuales de la Conferencia Episcopal Panameña que, en
pronunciamiento del 11 de mayo de 1989, afirmó que:
17