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conferencia de prensa en el Center for Strategic and International Studies,
de la Universidad de Georgetown, en Washington D.C., el Ing. Fernando
Eleta A., presidente de la Corporación Panameña de Radiodifusión, S.A.
(TV-4), les aseguró a los presentes que el pacto entre las televisoras estaba
funcionando a las mil maravillas y que el tratamiento que le daban las tele-
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visoras a los candidatos era equitativo y justo.
El primero en desconocer la palabra escrita, a escasas semanas de
haberla empeñado, fue el Canal 2, al negarse a transmitir publicidad, pa-
gada por adelantado, de la ADO y del candidato a legislador por el PDC,
Guillermo “Willy” Cochez. Que fuera el Canal 2 el primero en “jugar su-
cio”, no debe extrañar pues los dueños mayoritarios del canal mencionado,
tal como se ha dicho anteriormente, son miembros del Estado Mayor de las
Fuerzas de Defensa, quienes no son precisamente parangones de justicia y
principios democráticos.

Por otro lado, los canales 13 y 4 se negaron a transmitir cuñas del
PDC durante la campaña municipal, que se realizó a continuación de la
presidencial. La cuña censurada instaba a los panameños a votar, pero fue
considerada peligrosa por las obsecuentes televisoras mencionadas, por ha-
cer referencia “al daño ocasionado al país por lo que ha sucedido desde el
6 de mayo”. La cuña no mencionaba la palabra “fraude”, pero las televiso-
ras sabían que pensaba el panameño común y corriente. Y ese pensamiento
había que reprimirlo por dañino. ¡1984, elecciones en el mundo de Orwell!

No fue una casualidad que la abstención en las elecciones municipa-
les fue casi el doble que en las presidenciales. No fue casual tampoco que
el partido de las Fuerzas de Defensa, el PRD, ganara la mayoría de los al-
caldes y representantes.

Regresemos ahora al tema que nos ocupa, el control estatal a la tele-
visión durante la campaña presidencial.

Ninguno de los canales aceptó venderle a la oposición tiempo para
transmitir programas políticos. Esta negativa era la contraparte de la estra-
tegia de atiborrar a la teleaudiencia con imágenes de Nicky. Se manipulaba
a la opinión pública de 2 maneras: por un lado, la imagen y los discursos

17 “One Lady in the group (about 12 of us) identified herself as an American citizen but concerned be-
cause her family was from Panama and she knows that the television stations are not being fair about
their coverage of the election. Dr. E. (Ing. Fernando Eleta A.) gave her a copy of the agreement between
stations on how they were to assure fair and adequate coverage to all candidates. He assured her that the
agreement was working. In fact, Dr. E. emphasized, Dr. Arias had more commercials on Dr. E’s station
last week tan Dr. Barletta”. (Transcripción de la conferencia de prensa).
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